miércoles 15 de septiembre de 2010

Juan Carlos Lázaro (XINHUA)


El reciente anuncio del presidente de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía del Perú (Snmpe), Hans Flury, en el sentido de que este país tiene una cartera de proyectos mineros para los próximos años por encima de los 47.000 millones de dólares (mdd), generó alarma entre sus pares de Chile.

«Estrategia», el más importante medio de los hombres de negocios de Chile, en su edición del reciente 13 de septiembre dedica al tema un extenso artículo bajo el elocuente título de «Minería peruana amenaza liderazgo chileno», el cual empieza citando textualmente las declaraciones de Flury.
El diario reconoce que «Perú se ha desarrollado vertiginosamente en la última década, lo que ya hace temer a las mineras (chilenas) por su liderazgo».
Todo esto, «pese a que Chile presenta una cuantiosa cartera de proyectos mineros que implican una inversión de 50.000 mdd a 2015, gozando de precios del cobre por sobre los 3 dólares la libra y que le aseguran una posición de liderazgo en la región y en el mundo por los próximos diez años», dice «Estrategia».
«Es así (señala el diario) como los vecinos del norte (Perú) presentan cifras impensadas de hecho; en el año 2000 registraba como mayor inversión extranjera a la industria de las comunicaciones, sin embargo, hoy el sector minero ya tiene el liderazgo con inversiones estimadas por 47.000 mdd a 2017», indicó.
El diario observó que «mientras en los últimos diez años Chile posee una producción anual de toneladas métricas de cobre fino estable y sostenida, bordeando las cinco millones de toneladas anuales, Perú mantiene un crecimiento de la producción en alza constante, proyectando para 2020, 4,9 millones de toneladas, mientras que Chile estima producir 7.3 millones de toneladas métricas finas».
«A estas cada vez más estrechas cifras, la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco) en su informe de proyecciones de inversión en la minería, advierte que bajo las condiciones actuales de la industria, en 2017 Chile terminaría su ciclo productivo sostenido y comenzaría a bajar su producción», indicó con inocultable preocupación «Estrategia».
La cartera de proyectos mineros del Perú para el periodo 2010-2016, según su Ministerio de Energía y Minas, escaló de 39.323 millones de dólares (mdd) previstos a fines de julio del presente año, a 41.000 mdd en la actualidad.
Sin embargo, para el presidente de la Snmpe, Hans Flury, esa cartera para el periodo 2010-2020, llega a los 47.600 mdd. (En sus declaraciones a la prensa chilena, Flury estableció dicho periodo como 2010-2017).
Lo cierto es que estadísticas de 2009 de diferentes fuentes especializadas confirmaron al Perú como primer productor mundial de plata, el segundo de cobre y zinc, el tercero de estaño, bismuto y telurio, el cuarto de plomo y molibdeno, y el quinto o sexto de oro.
Actualmente también es el primer destino de la exploración minera en América Latina, tal como lo ratificó la consultora inglesa Metal Economics Group.
Según esa consultora, Perú capta el 25 por ciento de los capitales mundiales destinados a exploración minera en la región, seguido por México con 20 por ciento, Chile con 18 por ciento y Brasil con 12 por ciento.
Hace unos días, ante el VI Congreso Internacional de Mujeres Mineras, realizado en la ciudad de Ica, al sur de Lima, Flury detalló que la cartera de proyectos mineros se estima en 35.900 mdd, la de hidrocarburos en 8.300 mdd y la de electricidad en 3.400 mdd, totalizando 47.600 mdd hasta 2020.
En la proyección del viceministro de Minas, Fernando Gala, la cartera de inversiones mineras para los próximos seis años involucran 41.000 mdd, la cual cada día se incrementa con sucesivos anuncios de las diversas empresas exploradoras que operan en Perú.
«Este nivel de cartera de proyectos mineros debe alegrarnos pero no contentarnos porque la cartera de proyectos de Chile suma 50.000 mdd, aunque en el Perú podemos esperar más proyectos», dijo.
Otro portavoz del Ministerio de Energía y Minas señaló que el próximo año entrarían en operación por lo menos cuatro proyectos en diversas partes del país, con lo cual se espera aumentar sus índices de producción minera.
Uno de estos proyectos es la ampliación de la mina de hierro de tajo abierto de Shougang Hierro Perú, en Ica, en el que se están invirtiendo 1.000 mdd y debe concluirse en 2011 para iniciar una nueva etapa de su producción.
El segundo proyecto importante para 2011 es la culminación de la ampliación de la mina Antamina, en las alturas del departamento de Ancash, al noreste de Lima, en la que se está invirtiendo 1.100 mdd.
Antamina inició operaciones en 2001 y produce concentrados de cobre y zinc y, en menor medida, molibdeno y concentrados de plomo y bismuto.
La mina polimetálica de Colquijirca, en la que se invertirá 200 mdd aproximadamente, es el tercer proyecto que iniciará operaciones en el 2011. Se ubica en el departamento centroandino de Junín, y pertenece a la Compañía de Minas Buenaventura.
Y el cuarto proyecto que también operará a partir del próximo año, que representa una inversión de 56 mdd, es la mina Tantahuatay, en Cajamarca, que operan las empresas Besuenaventura y Southern Copper Corporation.
Se espera que esta mina produzca entre 80.000 y 100.000 onzas de oro y alrededor de 426.000 onzas de plata anuales.
Sin embargo, según el Ministerio de Energía y Minas, en el 2011 podría empezar a operar un quinto proyecto minero, la mina Pucamarca de Minsur, ubicada en Tacna, en el sur del Perú, que representa una inversión de 90 mdd.
El economista Oscar Dancourt, de la Universidad Católica de Lima, observó que desde 2001 Perú experimenta un crecimiento en la producción de sus metales, hecho que coincidió con el aumento de sus precios en el mercado internacional.
El auge de los precios internacionales de los metales, añadió Dancourt, es parte del auge general de precios de las materias primas iniciado en 2002 y 2003.
Los cinco principales metales de exportación de Perú son la plata, el cobre, el oro, el zinc y el plomo, cuyos precios desde 2003 se dispararon a niveles sin precedentes históricos.
El precio del cobre se multiplicó por cuatro y el del oro se duplicó. El precio del zinc creció 4,5 veces y el precio del plomo se ha triplicado.
Desde 2001 y hasta 2008, la producción del cobre aumentó 60 por ciento y la del oro, hasta 2006, creció 50 por ciento, con una disminución de 10 por ciento en 2007 para volver a crecer en 2009.

De 2001 a 2007 la producción del zinc se incrementó 38 por ciento y la producción de plomo se elevó 65 por ciento