martes 9 de marzo de 2010

Oscar Escamilla (ANSA)

Las mujeres, los niños y los ancianos son las principales víctimas de la violencia intrafamiliar en Colombia, de acuerdo a las estadísticas del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses.

Según los registros de Medicina Legal, en 2008 un total de 46.922 mujeres fueron agredidas por sus cónyuges o compañeros sentimentales, en contraposición con los 5.742 hombres que recibieron maltratos de sus esposas.
En 2009, de acuerdo a esos mismos registros, la violencia doméstica afectó a 49.102 mujeres, frente a los 6.469 hombres que recibieron ese tipo de maltrato.
Claudia Mercedes Monroy, coordinadora División de Servicios Forenses del Instituto, explicó a ANSA que «la intolerancia, el alcoholismo, el machismo, los celos, factores económicos, religiosos, culturales y costumbres sociales» son las principales causas del maltrato en los hogares.
Monroy atribuyó además que varias de las mujeres víctimas no conocen ni reclaman sus derechos ante este tipo de agresiones y en varias se detecta una «baja autoestima», lo que facilita las circunstancias para convertirlas en blanco de esa violencia.
Agregó que «la incursión de la mujer en el campo económico y laboral crea un medio hostil de rivalidad con el género masculino que facilita la violencia contra la mujer».
El perfil de las mujeres que suelen acudir al Instituto, el organismo en Colombia destinado recibir este tipo de denuncias, para informar de maltrato en su contra pertenecen en su mayoría a estratos socioeconómicos bajos, poseen un precario nivel educativo, perciben salarios mínimos, tienen en promedio más de tres hijos y algunas son amas de casa.
Pero además de las mujeres, otras de las víctimas de la violencia intrafamiliar son los menores de edad, tanto niños como niñas.
Según las estadísticas de Medicinal Legal, en 2008 unos 10.901 niños fueron agredidos, principalmente por sus padres; mientras que en 2009 los niños violentados fueron 11.485.
El domingo es el día en que se registran el mayor número agresiones contra los menores, al igual que contra los ancianos, las otras víctimas también de esa violencia doméstica local, que en 2008 afectó 1.175 personas y en 2009 a 1.337.
En medio de toda esta violencia hay un segmento más de agredidos que Medicina Legal denomina «violencia entre otros familiares» y que corresponde principalmente a peleas entre hermanos, primos, cuñados y parientes en general que no hacen parte del núcleo familiar.
Allí también las mujeres fueron las mayores víctimas.
En 2008 Medicina Legal atendió 5.824 denuncias interpuestas por mujeres atacadas o maltratadas por sus parientes; frente a 4.865 casos de hombres lesionados o golpeados.
En 2009 la cifra de denuncias aumentó, pues 10.018 mujeres fueron agredidas y 5.450 hombres reportaron maltratos físicos en su contra.
Monroy dijo que «la explicación» para toda esta violencia «está en lo cultural: se aprende la resolución de los problemas a través de la violencia y se va transmitiendo de generación en generación», sujeto, además, al «gran arraigo del machismo» que se ejerce en el país.
La especialista dijo que las consecuencias de la violencia doméstica son por lo general de «tipo psicológico» además de «daños físicos, llegando en algunas ocasiones hasta las muertes violentas».
Según el Sistema de Vigilancia Epidemiológica de Medicina Legal, entre 2005 y 2007 se registraron 436 muertes producto de la violencia intrafamiliar.
Monroy explicó que, mientras los niños agredidos en sus casas «crecen con personalidades violentas y maltratadoras», también se hacen evidente que esa violencia repercute en un «bajo rendimiento académico», que a veces lleva a «la deserción escolar».

En tanto que «las mujeres crecen en un medio que estimula la baja autoestima, que aumenta su vulnerabilidad y desconocimiento de sus derechos, llevándolas a aceptar la violencia contra ellas como una situación normal», afirmó la experta.